Procesión un tanto atípica la que tuvo lugar en la tarde de ayer con la
Virgen del Carmen por las calles más céntricas de nuestro pueblo. A las 8 de la
tarde estaba prevista su salida, pero desde la hermandad carmelita se decidió
retrasarla en media hora además de modificar y acortar el itinerario por las
calles más próximas a su templo: Plaza del Carmen, Mesones, Saladillo,
Corrientes, Antonio Álvarez, Sor Ángela de la Cruz, Cristo de la Sangre y
entrada en el templo.
En el interior de la iglesia se rezó la Salve a la Virgen y acto seguido
el portavoz de la Junta de Gobierno, Florencio Salvador Díaz Fernández, explicó
que “ante la probabilidad de lluvia hemos
decidido movernos entre nuestro templo y San Sebastián, que son los únicos
lugares donde podemos refugiarnos”, pidiendo comprensión a los fieles por
la decisión tomada.
Ya a las 20:30 horas los pasos de San José con el Niño y la Reina del
Carmelo se pusieron en la calle, con un discurrir lento. En la esquina de
Mesones con Saladillo la hermandad de la Virgen de la Asunción realizó el
tradicional saludo y la ofrenda floral. Cuando la hermandad se disponía a
llegar a las Hermanas de la Cruz –de hecho el paso de San José pudo hacerlo–, a
la altura de calle Sor Ángela de la Cruz comenzó a llover ligeramente, a lo que
la hermandad respondió tomando inmediatamente la calle Cristo de la Sangre
para, tras superar varias dificultades por la estrechez del paso, refugiarse en
su templo a las 21:50 h., dejándonos así imágenes para la historia. Felizmente
las imágenes no sufrieron daño alguno y la hermandad pudo completar un año más
su procesión gloriosa por las calles de Estepa.
Hermandades como Paz y Caridad o los Remedios, que debían presidir al paso
de la cofradía por sus sedes canónicas, realizaron su ofrenda floral al
comienzo y a la finalización de la procesión, respectivamente.
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