La Iglesia de los Remedios acogió
este domingo, día 15 de diciembre, el pregón de la Virgen de la Esperanza
Coronada de la Archicofradía de Paz y Caridad, en las vísperas del 18 de
diciembre, día de su fiesta onomástica.
El acto ya ha alcanzado su
trigésimo quinta edición, pues desde el año 1985 se viene celebrando de manera
ininterrumpida tras la propuesta del entonces delegado del Grupo Joven de la
hermandad del Jueves Santo, D. José Joaquín Luque Jurado, que pidió la creación
de un pregón ofrendado a su titular mariana.
En esta ocasión, la persona
designada para ensalzar la devoción esperancista ha sido el camarero-vestidor
de la cofradía D. Jesús Manuel Borrego Llamas.
El hermano mayor, D. Francisco
Javier Merat Olmedo, junto a la Diputada de Juventud, Dña. Marta Rueda
Fernández, acompañaron al pregonero y su presentador por primera vez en este
acto desde la entrada de la nueva Junta de Gobierno el pasado mes de enero.
El pregón dio comienzo con la
interpretación de la marcha “Inmaculada” por parte de la Agrupación Musical de
la hermandad, dando así paso al presentador D. Miguel Ángel Borrego Llamas, el
cual hizo una breve presentación de la vida del pregonero, su hermano,
aludiendo sus rasgos personales más característicos como son su heredada
profunda devoción por la Virgen de la Esperanza y una educación en los valores
cristianos. También recordó el día en el que ambos entraron a formar parte del
cuerpo de vestidores y camareras de la Santísima Virgen, un gran compromiso y
responsabilidad que a día de hoy siguen siendo parte importante en el día a día
de los dos. Miguel no quiso dejar escapar la ocasión para alabar también las
mayores virtudes de su hermano, que se entrega sin medida a todo aquello a lo que
le apasiona, no escatima tiempo, no exime de cansancio, preocupaciones y
nervios, la sinceridad para decir lo que piensa, su madurez para afrontar
momentos difíciles o la fidelidad a sus principios.
De manera seguida sonó la marcha
“Santa María de la Esperanza”, y a todo esto llegaba la hora del pregonero,
quien con gran alegría en su rostro siempre mostró su amor hacia la Virgen,
pero también quiso dejar constancia de la importancia para él de otras
devociones menos valoradas como la Inmaculada Concepción o la Asunción, Patrona
de Estepa. En la recta final de su alocución tuvo especial mención hacia su
madre, a la que confesó por primera vez ser la mujer de su vida, un sentimiento
que nunca antes fue capaz de declararle.
Ya puedes escuchar el pregón de la
Virgen de la Esperanza, íntegro, aquí.
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